A la tercera mayor isla del país heleno llegan cada día alrededor de 300 inmigrantes. Si en Italia, la mayor parte de los desembarcos proceden de Libia, Siria y Afganistán, según la Organización Mundial de Migraciones (OIM), a Grecia llegan desde Turquía.
“Somos sirios, y nuestro sueño es simplemente sentirnos humanos como todo el mundo”, asegura uno de los recién llegados.
En enero llegaron a Lesbos más de 737 refugiadoss. Un mes más tarde, 1000 y en marzo, una cantidad tres veces superior. Sólo en mayo, el número de inmigrantes registrados superó los 7200, una cifra que se espera vaya en aumento durante el verano, cuando las condiciones del clima son favorables.
La fuerte ola migratoria llega cuando Grecia está al borde de la quiebra.
“Cuando tu casa se incendia y la isla es tu casa… uno llama a los bomberos pero no se va luego a tomar un café, haces lo que puedes para ayudar a apagarlo.Y lo hicimos porque estábamos desesperados. Seguimos necesitando la ayuda de este cuerpo
