La muestra de este artista búlgaro, recoge obras basadas en la tradición de los iconos religiosos especialmente relevantes en las escuelas rusa, griega y búlgara y que llevan en sí la grandeza de la imagen y la belleza de una representación plástica en unas piezas siempre a caballo entre la pintura y el relieve.
La muestra, que podrá ser visitada hasta el próximo 2 de abril, recoge obras basadas en la tradición de los iconos religiosos especialmente relevantes en las escuelas rusa, griega y búlgara. El icono nació, más que como objeto artístico, como elemento de representación para atraer la mirada y ayudar a concertar la devoción de la fe de los cristianos. Los elementos de la representación siguen siendo los personajes de la Sagrada escritura por excelencia: Cristo, el Pantocrátor, que bendice la creación, María, la Theotokos o Madre de Dios intercesora suplicante, los arcángeles y los santos.