El fiscal general mexicano ha aclarado que no se han encontrado restos de explosivos ni de fuego en la deflagración registrada el pasado jueves en la Torre de Petróleos Mexicanos, que causó 37 muertos y más de cien heridos. Se trató de una “explosión difusa”, lenta y horizontal, “perfectamente definida, y que es característica de las explosiones de gas.
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