El Aguila de sangre (nórdico antiguo: rísta blóðörn) fue un método de tortura y ejecución que se menciona en la literatura de algunas sagas nórdicas, se supone que como rito de sacrificio humano. La acción se ejecutaba abriendo a la víctima desde la columna vertebral, cortando y abriendo las costillas de forma que parecían alas manchadas de sangre, y sacando los pulmones hacia afuera. La herida abierta se cubría con sal. Algunas víctimas de este tipo de ejecución, mencionadas en textos de poesía escáldica y sagas, pudieron ser el rey Ælla de Northumbria y Edmundo Mártir rey de Anglia Oriental, Halfdan Haleg hijo del rey Harald I de Noruega, Máel Gualae rey de Munster, y posiblemente el arzobispo Ælfheah de Canterbury.
La autenticidad histórica de esta práctica está muy discutida. Para unos es un hecho histórico: pruebas de atrocidades alimentadas por el odio cristiano hacia el paganismo; otros lo toman como ficción: sagas islandesas heroicas, poesía escáldica y traducciones inexactas.