El Gobierno de Turquía ha comunicado al Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) que su frontera con Siria estará cerrada al tráfico comercial pero permanecerá abierta para los refugiados sirios que huyen de su país a causa del conflicto, según ha informado este miércoles una portavoz de ACNUR.