El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha admitido que la corrección de las cuentas públicas tendrá "un costo" en términos de crecimiento en el corto plazo, al tiempo que ha asegurado que ha decidido aceptar el déficit del 5,3% planteado por Bruselas porque es "consciente" de que hay que mantener siempre "el máximo nivel de coordinación y consenso" con los socios europeos.