En el contexto de los recientes actos de racismo contra la comunidad etíope de Israel, el presidente Shimon Peres visitó la Escuela Amit Reshit en Jerusalén, donde los niños de origen etíope se han integrado con éxito.
Allí, Peres escucho a la cantante de octavo grado, líder del coro del colegio, y quedó abrumado ante su talento. Esa noche, se sentó, puso sus pensamientos por escrito y compuso una canción para ella y toda la comunidad etíope. No conforme con ésto, Peres solicitó a sus asistentes que envíen la lírica al músico Idan Raichel para que musicalice a sus palabras.
Raichel trabajó en la melodía durante una semana y solicitó apoyo a la cantante Kabra Kasai, quien emigró a Israel desde Etiopía, para que interprete la canción del presidente.