Aproximadamente 2.000 personas se reunieron la noche del pasado lunes frente a la Corte Suprema de Jerusalén, en respuesta al llamado de los rabinos Yaacob Yosef y Dov Lior, quienes fueron arrestados la semana pasada por sospechas de incitación a la violencia y al racismo, una decisión que causó gran conmoción entre sus fieles seguidores.
Por otra parte el rabino Eliyahu de Safed, también estuvo presente en la concentración y afirmó que "las leyes de la torá siempre serán superiores a la ley civil".
Esta situación en el mundo religioso, responde al apoyo incondicional de estos rabinos al controversial libro "Torah Hamelech", que afirma que bajo algunas condiciones está permitido dar muerte a un no judio sin quebrantar la leyes principales del judaismo.
