El voraz incendio desatado en las instalaciones centrales de la empresa sueca de muebles IKEA, en Natania, que destruyó por completo el edificio y la mercadería, el pasado sábado por la noche, está siendo investigada por la policía.
El equipo de investigación no descarta aún la posibilidad de que fuese provocado, pero también existen fuertes sospechas de tratarse de un fallo eléctrico.
Mientras tanto los equipos de seguridad, continúan examinando el circuito cerrado de televisión, para encontrar los indicios causantes del siniestro y la explicación de cómo el fuego se extendió tan rápidamente, a pesar de la alta tecnología de seguridad contra incendios instalados en los almacenes.