“El ojo puede engañarnos pero, sobre todo, nos engaña el cerebro. Es él quien construye nuestra percepción”, asegura Martínez-Conde. “Todos tenemos una visión similar porque nuestros cerebros están cableados de una forma parecida. Existe una discrepancia entre realidad y percepción, pero ocurre de forma muy similar en todos los cerebros”. “No hay razones por la que su tejido deba ser biológico y no artificial”. Aunque se comprende el proceso de percepción de la mente, la científica no duda en afirmar que el cerebro es el gran desconocido. “Sabemos que existen 24 áreas de procesamiento visual y sólo conocemos el funcionamiento de tres de ellas. Lo que entendemos del cerebro es una parte ínfima en comparación con lo que nos queda por saber”, explica Martínez-Conde.