La fiesta musulmana del sacrificio cobra un sentido especial este año en Egipto. Por primera vez en 30 años los egipcios celebran la principal festividad del calendario sin Hosni Mubarak como presidente y en pleno ambiente electoral. Las incertidumbres que rodean el complicado proceso de transición no consiguen enturbiar las esperanzas de cambio. ... http://es.euronews.net/