Un equipo de científicos estadounidenses ha desvelado los secretos del vuelo de los murciélagos, los únicos mamíferos capaces de tener vuelo impulsado por su propia energía. La investigación, desarrollada por investigadores de la Universidad del Sur de California, demuestra que el movimiento de las alas de los pequeños murciélagos les ayuda a mantenerse en vuelo, y revela las diferencias entre el vuelo de las aves y el de los mamíferos voladores. Como en todo avance de la aerodinámica, la clave para la capacidad planeadora de los murciélagos está en sus alas. Mientras éstas empujan el aire tanto al ascender como al descender, las aves pueden separar las plumas principales de sus alas, simulando las tablas de las persianas, para que el movimiento ascendente no produzca fuerza aerodinámica.