Hoy sabemos que se comunicaban entre ellos (tienen el gen FOX P2 del lenguaje, pero se desconoce si su capacidad lingüística era como la del 'Homo sapiens'), que vivían en bandas dentro de cuevas-campamento que acondicionaban y que cubrían el suelo con pieles, como ha comprobado el director del IPHES, Eudard Carbonell, en el yacimiento de Abric Romaní en Capellanes (Barcelona); también usaban trípodes para asar la caza que acompañaban con frutos recolectados. Sabemos que enterraban a sus muertos y, en 2009, el norteamericano Metin Eren incluso defendía en un trabajo que sus herramientas fueron más eficientes y duraderas que las de los sapiens.