Tras la ofensiva lanzada por los rebeldes contra Trípoli, bastión del régimen, y la toma de control de gran parte de la ciudad, la rebelión proclamó que la era Gadafi se acerca al fin. Pero Saif al Islam, influyente hijo del coronel Muamar Gadafi, cuya captura se había anunciado, reapareció el 22 de agosto y dijo que su padre seguía en Trípoli.