Radicales islámicos vinculados a Al Qaeda abandonaron este fin de semana la capital de Somalia, Mogadiscio, escenario de cruentas batallas durante décadas, donde escasean alimentos y ya ha sido declarada zona de hambruna por Naciones Unidas. La emergencia humanitaria empeora por la llegada constante de miles de refugiados, desde distintos puntos del país. teleSUR