Aunque el mes de septiembre supone para muchos la vuelta a la rutina tras el descanso veraniego, una veintena de menores que residen con sus madres en las cárceles valencianas y baleares disfrutan estos días de sus vacaciones en un campamento de Moraira (Alicante), en el que los pequeños disfrutan de la playa, la piscina y los juegos al aire libre.