Millones de jóvenes en todo el mundo dieron sus primeros pasos guiados por las recetas del médico norteamericano Benjamin Spock (recientemente fallecido a los 94 años de edad), que rompió con la teoría tradicional de la disciplina rígida y aconsejó educar a los niños con el amor familiar y el sentido común como principales herramientas. Considerado un auténtico "gurú" de la pediatría del siglo XX, su obra "Baby and child care", El libro se convirtió en la biblia de los padres en el período que siguió a la Segunda Guerra Mundial en Estados Unidos. "Todo lo que se necesita es confianza", aconsejaba. "Los padres saben más de lo que creen", fue una de sus premisas. Sostenía que era mejor alimentar a los bebes cuando éstos quisieran comer y no incomodar a los padres y a los propios niños con un horario rígido de comidas. Su prédica invitaba a respetar al niño y hacerse respetar por él, poca TV, escuchar las necesidades emotivas, no humillarlo, darle buen ejemplo y no ahorrar amor.