Fidel Castro en la Asamblea Nacional 01

2010-08-08 21

Al principio, hace sólo ocho semanas, pensé que el peligro inminente de guerra no tenía solución posible. Tan dramático era el cuadro que tenía delante, que no veía otra salida como no fuera una supervivencia, tal vez probable, en la parte de este hemisferio que no tenía motivo para ser blanco de ataque directo y en algunas regiones aisladas del planeta.
Era muy difícil, sabiendo que el ser humano se aferra siempre a una perspectiva por remota que sea.
A pesar de todo, lo intenté.