Keroro, ya acoplado en casa de los Hinata, piensa que tiene que tener una habitación para dormir ya que pasará allí mucho tiempo. Aki le dice que tiene una habitación en el sótano, debajo de la escalera y les cuenta a Fuyuki y Natsumi que esa casa está construida sobre una cárcel. Keroro le pide a Fuyuki la Kerobola y convierte su habitación, un cuarto lleno de telarañas y barriles viejos en una habitación pintoresca donde hay de todo: internet, videojuegos, maquetas, música... y además descubren que allí yace una fantasmita siguente episodio como Keroro se instalo el la casa de los Hinata