Las negociaciones entre Ferrocarriles Argentinos, el gobierno y el gremio de La Fraternidad han fracasado, lo que ha llevado a un paro encubierto programado para el 28 de enero. Durante las horas pico, de 9 a 15 horas, se espera una interrupción significativa del servicio. Mientras tanto, los pasajeros enfrentan aumentos del 600% en los pasajes y recurren a saltar molinetes como protesta ante los altos costos. La situación refleja un fenómeno colectivo de descontento en medio de la crisis económica.