Cuatro personas han sido condenadas a penas de entre 10 y 24 años de prisión por el asesinato a golpes de Samuel Luiz, un joven auxiliar de enfermería de 24 años, ocurrido en julio de 2021 en La Coruña. El caso, que conmocionó a toda España, fue calificado por el tribunal como un crimen motivado por discriminación hacia la orientación sexual de la víctima.
La sentencia, emitida este miércoles por un tribunal de La Coruña, impuso la pena más alta, de 24 años, a Diego M.M., principal acusado, al considerar que actuó con "discriminación por motivos de orientación sexual". Según el fallo, el ataque comenzó cuando Diego M.M. acusó a Samuel Luiz, que realizaba una videollamada cerca de una discoteca, de grabarle con su móvil. Acto seguido, le amenazó diciendo: "Deja de grabar, a ver si te voy a matar, maricón", antes de iniciar la agresión. La sentencia también recoge que el acusado mostró "una absoluta falta de empatía y una crueldad que merecen un mayor reproche penal".
Otros dos implicados, Alejandro F.G. y Kaio A.S.C., fueron sentenciados a 20 años y 20 años y medio de cárcel, respectivamente, mientras que Alejandro M.R., señalado como cómplice, recibió una pena de 10 años. Aunque no participó directamente en los golpes, impidió que Luiz escapara y que otras personas pudieran socorrerlo.
Por otro lado, la novia de Diego M.M. fue absuelta tras determinarse que no participó en la paliza. La magistrada subrayó en la sentencia la "crueldad" con la que actuaron los condenados, dejando a la víctima "tirada en medio de una rotonda, inconsciente y con el rostro ensangrentado".
El asesinato de Samuel Luiz generó una ola de indignación en toda España, con manifestaciones de repulsa en varias ciudades, incluidas Madrid y Barcelona. Además, la comunidad LGTBI denunció el crimen como un acto de homofobia, y figuras públicas como el presidente Pedro Sánchez expresaron su condena.
La sentencia de primera instancia obliga también a los condenados a indemnizar a la familia de Samuel Luiz con 303.284 euros. Cabe destacar que esta resolución puede ser recurrida ante un tribunal superior.