Franco, un joven de 22 años, fue asesinado por un narcotraficante en Morón mientras regresaba a su casa tras una noche con amigos. A pesar de no tener vínculos con la banda criminal, recibió un disparo en la cabeza. La comunidad había denunciado actividades sospechosas y la policía inició una investigación tras varias quejas. La madre de Franco y vecinos relatan el temor y la inacción policial ante el creciente peligro en la zona.
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