El papa Francisco pidió este miércoles en su mensaje de Navidad que callen las armas en Ucrania y se "tenga la audacia de abrir negociaciones para una paz justa" y que en Gaza "cese el fuego, que se liberen los rehenes y se ayude a la población extenuada por el hambre y la guerra".
En al balcón de la logia central de la fachada de la basílica de San Pedro, Francisco como suele habitual en su mensaje de Navidad reflexionó sobre los conflictos y males que afectan al mundo ante las cerca 30.000 personas que se acercaron a la plaza de San Pedro.
"Que el nacimiento del Salvador traiga una nueva estación de esperanza para las familias de los miles de niños que mueren a causa de un brote de sarampión en la República Democrática del Congo, para la población del Este de ese país, y de Burkina Faso, Malí, Níger y Mozambique", dijo el Sumo Pontífice. Y añadió: "La crisis humanitaria que les afecta está causada principalmente por los conflictos armados y la lacra del terrorismo, agravados por los efectos devastadores del cambio climático, que provocan la pérdida de vidas y el desplazamiento de millones de personas".