Vinícius Júnior continúa haciendo historia en el fútbol.
Un día después de ser elegido mejor jugador del mundo, el brasileño brilló en la final de la Copa Intercontinental, ayudando al Real Madrid a conquistar su 14º título.
Con un gol y una asistencia, el número 7 fue la estrella de la noche en el Estadio Lusail.
Desde el principio, Vini Jr. demostró su talento. En los primeros minutos, deleitó al público con un regate a Rodríguez que puso en pie a los más de 69.000 espectadores.
El público, mayoritariamente favorable al Real Madrid, parecía tener una energía especial para el brasileño, que era vitoreado a cada toque de balón.
El momento de la consagración llegó en la primera parte. Tras sufrir una falta que derivó en penalti, Vini Jr. asumió la responsabilidad y salió a celebrarlo con sus compañeros.
Más tarde, volvió a ser decisivo: recibió un pase de Bellingham, regateó magistralmente al guardameta Moreno y le pasó el balón a Mbappé, que solo tuvo que empujarlo a la red.
Su actuación le valió el título de mejor jugador del partido y del torneo.
Además del título, la actuación de Vini Jr confirmó su reputación de jugador decisivo. Era su duodécima final con el Real Madrid, con ocho goles y seis asistencias en partidos decisivos.
Al final, el delantero celebró: «Ha sido una gran semana, con compañeros que siempre me han apoyado. Vestir esta camiseta es un sueño hecho realidad».
