En un contexto donde los cultivos tradicionales de la provincia de Misiones, como la yerba mate y el té, pasan por una crisis debido a los costos de producción elevados y bajos precios en mercados tanto internos como de exportación, la diversificación se presenta como una altern iativa atractiva para los productores misioneros. En los últimos cinco años, Gabriel Jasiuk, exportador de frutas de Dos de Mayo, apostó por una novedosa fruta llamada Pitaya. Su intención era comprobar si esta fruta era apta para su producción en la provincia, y para 2025 pretende pasar de cuatro mil plantas a dieciocho mil.
FS.