Se llama Ahmed Mahmoud Hamada y está desaparecido desde 2011. Su hermana cuenta a EFE que él, su sobrino y otras once personas se desvanecieron en el camino a Damasco en aquél año. Ahora, espera frente a las puertas de la cárcel siria de Sednaya para ver si sus familiares son algunos de los detenidos supervivientes en la infame prisión.