Crece la ilusión en el Athletic Club, cuya afición confía cada vez más en que esta temporada puede ser memorable. Los leones han ganado cuatro partidos oficiales consecutivos por primera vez desde enero y se han aupado a la cuarta posición de LaLiga EA Sports (LL), dando un importante paso hacia el objetivo de clasificarse para la Champions League por segunda vez en el siglo actual.
Su resultado más reciente fue sin duda el mejor de todos; el cuadro de Ernesto Valverde tumbó al Real Madrid en LL por primera vez en casi un decenio, venciendo por 2-1 a los blancos el miércoles en un duelo adelantado de la 19.ª jornada. "Son tres puntos muy importantes que nos dan más confianza aún en lo que estamos haciendo", dijo Valverde, al mando de un equipo que está mostrando una enorme fiabilidad y enlaza ya diez encuentros invicto en todas las competiciones (G7, E3).
No es este el mejor momento para visitar San Mamés, pero el Villarreal ansiará hincarle el diente al Athletic después de haber ganado solo uno de los últimos 11 choques entre ambos (G1, E6, P4). Confianza no le faltará al Submarino Amarillo, en una racha de cinco encuentros sin perder en LL (G2, E3) desde su derrota por 2-0 ante el Real Madrid a principios de octubre.
Para asaltar La Catedral, el Villarreal necesitará a buen seguro una continuidad en el juego mucho mayor que la que tuvo la pasada jornada, en la que desaprovechó una ventaja de dos goles al descanso y terminó empatando con el Girona (2-2). "Quizás con el segundo gol dimos por ganado el partido", lamentó el entrenador groguet, Marcelino, que habrá aleccionado a sus jugadores para no tropezar dos veces con la misma piedra. Ubicado en la quinta posición antes de esta jornada y aspirando a finalizar entre los cuatro primeros por primera vez en nueve años, el Villarreal ha sufrido solo dos derrotas en sus últimas 16 salidas ligueras (G9, E5, P2).