Beber alcohol puede causar problemas estomacales, pero si sabes qué es lo que tiene peores efectos sobre el estómago, podrás evitarlo.
Las bebidas alcohólicas fuertes y concentradas son las que más dañan el tracto gastrointestinal. Por eso es mejor evitar los licores de alta graduación, los vinos fortificados y las cervezas de alto VAB.
Algunas bebidas alcohólicas también pueden ser ricas en un conjunto específico de hidratos de carbono denominados FODMAP.
Si tienes intolerancia a los FODMAP, beber alcohol con alto contenido en ellos puede provocarte hinchazón y dolor de estómago.
Por eso es mejor evitar el ron, el oporto, el jerez y los vinos dulces como el Moscato o el zinfandel blanco.
El mejor alcohol para las personas con estómago sensible son las bebidas con bajo contenido en alcohol y azúcar, como las cervezas rubias ligeras y los spritzers de vino.
El vodka y la ginebra son buenas opciones para las personas con intolerancia a los FODMAP, pero tienen un ABV más alto.