En Villa Gesell, estafadores han utilizado el derrumbe del edificio Dubrovnik como pretexto para llevar a cabo una estafa telefónica, alegando cortes programados de electricidad. Esta modalidad de fraude es común en pueblos del interior y consiste en obtener datos personales bajo la falsa premisa de interrupciones eléctricas. Las autoridades locales advierten sobre este tipo de engaños y continúan trabajando para prevenirlos.