Aconsejada por un amigo, Cristina decidió cambiar de rumbo profesional. Tras 10 años trabajando en una fábrica ahora quiere ser conductora de autobús. Solo le quedan las prácticas para sacarse el carnet. Sin subvención le sería imposible.
obtener un permiso de autobús y un certificado de aptitud profesional llega a costar unos 4.000 o 5.000 euros. Y esto hace que no sea atractivo para muchos jóvenes. Relacionado con ellos se suma un segundo problema: hay límites para conseguir este carnet de autobús. No se puede acceder a cualquier edad a conductor de autobuses.