Durante una gala sorpresa, los participantes se enteraron de que debían votarse entre sí, lo que generó tensiones y conflictos. La situación se complicó cuando Silvina Escudero llegó al camarín con un gran séquito, causando incomodidad entre sus compañeros. La dinámica del certamen sigue siendo impredecible, con alianzas y rivalidades en constante cambio.