Donald J. Trump, el ex presidente que presume de que con él en la Casa Blanca Rusia nunca habría invadido Ucrania, y Volodimir Zelenski, el presidente al que la campaña de Trump y una parte creciente del establishment republicano ridiculiza tildándolo de pedigüeño y "vendedor a domicilio", se han reunido este viernes en Nueva York, en la enorme torre que el multimillonario posee justo en frente de la sede de la ONU.
Zelenski se vio el jueves con Joe Biden y Kamala Harris, que reafirmaron el compromiso de EEUU con su causa, pero no estaba claro si habría encuentro con Trump, después de lo que su partido consideró una ofensa grave. Antes de las citas en Naciones Unidos, el líder ucraniano visitó una fábrica de armamento en la localidad de Scranton, en Pensilvania, un estado en liza y nada menos que donde nació Biden. No había nadie del partido conservador, que clama estos días contra Kiev y ha pedido oficialmente la cabeza de su embajadora.
