Para la Primavera-Verano 2025, Rabanne sigue apostando por la dualidad entre lo cotidiano y lo exquisito. Su director creativo, Julien Dossena, ha presentado en París su nueva colección. Una propuesta que comienza con looks cortos de varias capas que atraen todas las miradas. Rabanne ofrece unos diseños donde los materiales, el estilo y la artesanía ocupan un lugar privilegiado.
En la colección destacan los tejidos de punto escarchados, encajes de guipur y jacquards plateados que sugieren al mismo tiempo el aspecto industrial de los envases y el brillo del futuro. Los tonos menta, rosa, lila y azul bebé tienden un puente entre lo dulce y lo clásico.
De contenido a liberado, la lencería y los vestidos delantal rozan y engalanan el cuerpo en medio de tejidos cada vez más suntuosos. Los looks reintroducen las rayas de colores, sólo que ahora también hay finas vainas de tul estampadas con bordados flotantes, acentuando el juego entre lo casual y lo lujoso.
Con esta colección, Rabanne desvela las ediciones artesanales, transformando como nunca antes sus icónicos bolsos de confección de 1969. Fieles a la búsqueda de la experimentación material, los discos metálicos de estos bolsos, que tienen su origen en los delantales de carnicero, han sido meticulosamente reimaginados.
París se ha vuelto a rendir ante Rabanne.