Una nueva investigación ha descubierto que las dietas basadas en plantas pueden ayudar a perder peso, a prevenir enfermedades cardiacas y a mejorar la salud general a largo plazo.
El investigador médico Yani Xu y su equipo descubrieron que el consumo de verduras crudas desempeña un papel importante en estos resultados.
La investigación analizó las dietas de 2.223 personas de entre 18 y 82 años. Los resultados revelaron que quienes se basaban en vegetales tenían menos riesgos de padecer obesidad.
"Una dieta basada en plantas es una opción viable para las personas que quieren controlar su peso corporal, mejorar la calidad de su dieta y prevenir y tratar enfermedades metabólicas", explicó la investigadora médica Yani Xu.
También se ha descubierto que las dietas basadas en plantas favorecen la salud del corazón, el cerebro, los intestinos y los niveles de colesterol, al tiempo que reducen el riesgo de enfermedades graves.
La aleatorización mendeliana reveló que consumir más verduras crudas tenía más probabilidades de contribuir a la pérdida de peso que los factores genéticos.
Llevar al extremo una dieta basada en vegetales crudos puede provocar carencias de nutrientes. Los expertos recomiendan incorporar gradualmente más verduras a la dieta para evitar complicaciones.
