¿Qué sigue pasando en Apure? Guerra en Venezuela por narcoeconomía colombiana (+Pérez Pirela)

2024-09-04 1

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Venezuela está pagando las consecuencias de la vecindad con un narcopaís. Han traspasado la frontera los enfrentamientos entre los factores del negocio de las drogas, incluyendo los gobiernos de Colombia y Estados Unidos y grupos paramilitares de todo signo. Para colmo de ironías, esas naciones que viven de la producción, el tráfico, el consumo de estupefacientes y el lavado de las ganancias ilícitas son los que acusan a Venezuela de ser un narcoestado.
En su emisión del martes 06 de abril, el programa Desde donde sea, de Miguel Ángel Pérez Pirela, desmenuzó el conflicto armado en el que se ha visto envuelta la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) en la región fronteriza del estado Apure, al enfrentar a irregulares colombianos.
“Queremos analizar lo estructural de este conflicto que fuerzas paramilitares están propiciando. No se sabe quiénes son, pero terminamos nosotros pagando las consecuencias y siendo atacados doblemente: con armas materiales y con armas informativas. Los victimarios se presentan como víctimas”, dijo el filósofo y comunicador social.
Actualización de datos
Inició el estudio del candente asunto, recapitulando y actualizando los hechos. Para ello citó materiales publicados por el portal RT en los que se señala que “el Gobierno venezolano inició hace 15 días una operación militar en el fronterizo estado Apure para combatir la presencia de grupos irregulares colombianos, denominada Escudo Bolivariano. Ese despliegue buscaba destruir los campamentos de esas organizaciones irregulares, vinculadas con el narcotráfico y la violencia armada, que están tratando de permear el país por el área limítrofe, ante la aparente ausencia de las autoridades colombianas”.
El moderador dijo no tener dudas de que tales organizaciones también están vinculadas con el gobierno colombiano, pues no se trata de un conflicto casual, sino algo alevoso y malintencionado que tenemos que soportar desgraciadamente.
“De hecho, Caracas señala a Bogotá de abandonar la vigilancia en la zona binacional, de manera deliberada, y de incluso prestarle apoyo logístico a estas células terroristas. (…) Mientras el Gobierno venezolano señala a Colombia de haber descuidado la frontera para facilitar la actividad de las organizaciones criminales y tercerizar un conflicto con Venezuela, desde la Casa de Nariño acusan a Miraflores de amparar a una fracción guerrillera para otorgarles el control del territorio y convertirlo en una vereda para el narcotráfico”, continúa el reportaje.
“Los enfrentamientos han dejado un saldo de seis campamentos destruidos, 9 irregulares abatidos, 8 soldados venezolanos muertos y 34 heridos, e implicó la captura de más de 33 personas, acusadas de pertenecer a estas organizaciones ilegales. Asimismo causó el desplazamiento de parte de la población civil de La Victoria hasta la localidad colombiana de Arauquita”, añade la nota.
“También hemos sabido de la colocación de minas antipersonas, algo que no conocíamos en Venezuela y que viene de Colombia, país con más de 70 años de guerra civil”, resaltó Pérez Pirela.
Reseñó que sobre la identidad de los grupos enfrentados se habla de varios campamentos de las disidencias de las extintas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), así como del Ejército de Liberación Nacional (ELN) y de agrupaciones paramilitares. “Par mí, todo levantamiento en armas, fuera de la legítima violencia del Estado, se llama paramilitarismo, por eso, esto lo es. Recordemos lo que se ha dicho en anteriores programas dedicados a este tema, que los puestos militares fronterizos del lado de Colombia fueron eliminados a finales de los años 90. Se dejó esa zona en manos de los paramilitares, que ahora son usados por el gobierno de Duque para atacar a militares y civiles venezolanos”.
Acotó que en las fotos de los elementos irregulares se observan insignias de las FARC, pero eso no quiere decir nada porque estamos hablando de un país especializado en falsos positivos,

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