“Ana” (N. de la r.: nombre ficticio de la mujer, que prefirió mantener el anonimato) es una madre de un nene de 2 años que habló con A24 y contó alarmantes detalles sobre la denuncia de abusos sexuales en un jardín de infantes de Wilde.
Según su testimonio, al recoger a su hijo un viernes, este le informó que había sido golpeado en la cara por una "chica". Al intentar abordar el problema con la directora del jardín el lunes siguiente, Natalia se encontró con evasivas y falta de respuestas.
Además, descubrió fotos inquietantes en el grupo de madres que mostraban a su hijo con lo que parecía ser un consolador.
A pesar de las pruebas fotográficas y las denuncias presentadas junto a otras madres, quienes también retiraron a sus hijos del jardín por situaciones similares, la administración del establecimiento no ha dado explicaciones claras.
"Ana" denuncia no solo los abusos físicos sino también el encubrimiento sistemático por parte del personal del jardín y otros padres que prefieren ignorar la situación para mantener sus rutinas laborales.
