Pablo Larraín completa su trilogía dedicada a las grandes figuras femeninas del siglo XX con un retrato tan intenso, delicado y dolido como profundamente estático sostenido por el brillante trabajo de su protagonista
Pablo Larraín completa su trilogía dedicada a las grandes figuras femeninas del siglo XX con un retrato tan intenso, delicado y dolido como profundamente estático sostenido por el brillante trabajo de su protagonista
Pablo Larraín completa su trilogía dedicada a las grandes figuras femeninas del siglo XX con un retrato tan intenso, delicado y dolido como profundamente estático sostenido por el brillante trabajo de su protagonista