Contratar a un contratista para realizar obras en su casa o negocio puede parecer una decisión inteligente, pero tiene algunos inconvenientes sutiles.
Los contratistas pueden parecer dignos de confianza; sin embargo, a veces puedes sentirte estafado cuando terminan su trabajo.
Independientemente del número de referencias que hayan recibido, he aquí cuatro estafas que debes evitar al contratar a un contratista.
Uno de los indicadores de que un contratista te ha estafado es que utilice materiales más baratos sin decírtelo antes de empezar.
A menudo acordarás un precio antes de que empiecen el trabajo; sin embargo, los costes ocultos o diversas estipulaciones llevarán a los contratistas a aumentar el precio.
Del mismo modo, antes de contratar a un contratista, asegúrate de que te dan un presupuesto totalmente cerrado y sin posibilidad de ir a más.
Algunos contratistas se aprovecharán de tu falta de conocimientos y se saltarán pasos importantes durante los proyectos de renovación, como la ventilación, la imprimación y el aislamiento.
