Con lágrimas en los ojos, miles de drusos asistieron el domingo en la localidad de Majdal Shams, en los Altos del Golán, un territorio ocupado por Israel, al funeral de los jóvenes muertos el sábado en un bombardeo atribuido al Hezbolá libanés. El gobierno de Israel prometió el domingo golpear "con fuerza al enemigo".