Una encuesta realizada en Japón a escala nacional reveló que uno de cada diez jóvenes ha sido víctima del ‘chikan’, que consiste en manosear sin consentimiento en un tren abarrotado.
Los datos incluían respuestas de 36.000 personas de entre 16 y 29 años, el 10,5% de las cuales había sufrido agresiones sexuales durante sus desplazamientos en tren.
El 90% de las respuestas positivas procedían de mujeres, y algunas mencionaron que habían sido acosadas en múltiples ocasiones, a veces "casi a diario".
El gobierno ha tomado medidas para combatir este antiguo problema aumentando la presencia de la policía de tránsito e instalando cámaras de vigilancia.
En los últimos años, se han creado aplicaciones móviles para denunciar estos incidentes y se han introducido sellos de tinta invisible "antimanoseo".
A pesar de que no se denuncian en todo el país, en 2023 se detuvo a unos 2.000 sospechosos de ‘chikan’.
En la mayoría de los casos, las supervivientes no denuncian el delito debido a la lentitud del proceso policial o a la dificultad para reunir pruebas.