La ministra interina de Relaciones Exteriores de Bolivia, María Nela Prada, anunció en una conferencia de prensa que su gobierno había decidido convocar al embajador en Buenos Aires luego del comunicado y de los comentarios del propio presidente Milei, que la semana pasada ya había comenzado a descalificar los sucesos del país vecino y se había desmarcado del respaldo internacional a Luis Arce.
Prada dijo que Bolivia "rechaza enérgicamente" los comentarios. Y en simultáneo, citó al embajador argentino en La Paz, Marcelo Massoni, para expresarle malestar. La gestión de Arce insistió que lo que ocurrió el miércoles pasado por la tarde en el país vecino fue una insubordinación militar que intentó atentar contra la democracia. Y cruzó a la Argentina también por haber dicho que Bolivia tiene 200 presos políticos. "Es un exceso y una negacionismo inaceptable", sostuvieron e invitaron al Presidente Milei a "informarse y actuar en el marco de los principios de respeto de la soberanía y no intervención en asuntos de otros Estados".