Uno de los detenidos por el crimen de Francis de Pablo Sáez, el joven que desapareció hace dos años en el madrileño distrito de Hortaleza, ha reconocido ante la jueza que le golpeó por la espalda con una barra de hierro y que enterró el cuerpo, acompañado de otra persona, en la fosa séptica de la cocina de un chalé de su familia en Aldea del Fresno, han informado a Europa Press fuentes jurídicas. El motivo del crimen fue que Francisco le reclamaba una deuda por una plantación de marihuana.
La jueza de Instrucción número 37 ha interrogado en dependencias de los Juzgados de Plaza de Castilla a dos de los arrestados por el crimen con el objetivo de ratificar su situación de prisión preventiva.