El papa Francisco abogó este viernes ante los líderes del G7, las siete democracias más avanzadas del mundo, por dar una dimensión ética a la Inteligencia Artificial (IA) y avisó de su uso en las guerras y la industria armamentística.
"Ninguna máquina debería elegir jamás poner fin a la vida de un ser humano", alertó el papa, el primero en asistir a una cumbre de estas potencias (Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón y Reino Unido), reunidas en la región italiana de Apulia (sur).