El 9 de junio de 2024 se celebran las elecciones europeas.
Todos los partidos centran sus estrategias de la recta final de campaña en captar el voto de los indecisos.
Formaciones que, normalmente, no suelen tener cabida en las instituciones locales, autonómicas o generales, están tirando la casa por la ventana para tratar de obtener alguno de los escaños en juego para España.
Carlos Herrera, en su editorial en 'Herrera en COPE', detalló los datos demoscópicos que se esperan para estos comicios y qué partidos pueden llegar a la Eurocámara:
Nosotros estamos metidos como saben en la recta final de la campaña electoral de las elecciones europeas del próximo domingo. Hoy hay encuestas, son bastante coincidentes. Dicen que ganaría el PP. Unos dicen que con entre el 31 y el 35% de los votos más o menos. Ahora tiene 13 escaños, obtendría 23. También ha subido el censo. El PSOE perdería un escaño y VOX se mantendría fuerte.
¿Qué pasa con estas elecciones? La representación es directamente proporcional, favorece a los experimentos políticos, a partidos más pequeños, a formaciones que en circunstancias normales no llegarían al Parlamento. Yo le recuerdo que hace años Ruiz Mateos logró colarse en el Parlamento Europeo, lo cual fue por otra parte su salvaguarda.
Deslizó que no le extraña que puedan entrar ciertos tipos de partidos al no estar en juego el Gobierno de España:
Y luego estas elecciones son gratis, es decir no te juegas el Gobierno de España, el votante puede darse el gusto incluso de frivolizar, por eso aparecen frikis de la política y por eso el Parlamento Europeo acaba siempre con un grupo de personajes atrabiliarios.
Pero Herrera lanza una clara advertencia antes de dejarse llevar por formaciones frikis o considerar estas elecciones como algo secundario:
Pero en España han pasado muchas cosas en los últimos tiempos para permitirnos el lujo de votar o no votar con cierta despreocupación. La semana pasada el Congreso aprobó la ley de amnistía que es una cacicada corrupta, inconcebible hace poco tiempo, contraria la mayoría de la voluntad de los españoles, una ley que consagra la desigualdad y que no han publicado en el BOE para ver si de sea manera la ocultan. El asunto es pernicioso para los intereses electorales del sanchismo.
Apuntó que el PP parece el claro ganador de las elecciones, pero queda por conocer cuánto le sacará de ventaja al PSOE:
Hay quien dice bueno tres o cuatro escaños de diferencia es poca ventaja. Son aquellos que dicen que con todo lo que está pasando tiene que sacar una ventaja de 10 puntos el PP. Una explicación sencilla, la división del voto de la derecha. PP y Vox ambos están contra Sánchez. Si los votos fueran en una sola candidatura, la desautorización de Sánchez sería tan abrumadora que quedaría políticamente deslegitimado pero con la derecha dividida, haciendo experimentos frikis, Sánchez puede seguir haciendo lo que le de la gana, sobre todo si le permite a Sánchez una derrota por la mínima.