La Audiencia Nacional ha comenzado este lunes el juicio al jubilado burgalés Pompeyo González, acusado de enviar seis cartas bomba en protesta por el apoyo de España a Ucrania frente a la invasión rusa. Las misivas fueron remitidas a La Moncloa, el Ministerio de Defensa, las embajadas de EEUU y Ucrania, una empresa de Zaragoza que fabrica material militar y el centro de satélites de la Base Aérea de Torrejón de Ardoz.