El expresidente uruguayoreflexionó acerca de la movilización que la CGT y distintos gremios realizaron ayer en la Argentina contra las políticas de ajuste de Javier Milei.
Contó que vio en los medios argentinos una entrevista que le realizaron a un vendedor callejero que lamentó que la movilización de ayer por el Día del Trabajador no haya sido tan masiva como en otras oportunidades.
“El hombre decía ‘salimos 5 o 6 millones a festejar el Mundial, y ahora que hay hambre no somos tantos'. Parece que esto es una enfermedad contemporánea. ¿Qué nos estará pasando?”, se preguntó y añadió: “No es ‘la hora de los hornos’ pero ¿será a caso la hora de que nos cocinen a fuego lento?”
“Veo chicos de 16 años que se llaman por teléfono por nada, y habiendo tanta causa para juntarse no podemos encausar esta energía. ¿Estaremos fallando?”, prosiguió. “Es como si tuviéramos un fantástico progreso tecnológico pero a la vez un fantástico retroceso de conducta colectiva y social para juntarnos y defendernos en barra, como corresponde”, dijo y envió un mensaje: “No hay solución individual. La salvación siempre es colectiva, hombro con hombro. Nadie se salva solo”.
