Juan José Méndez Vega, reconocido escultor empírico e hijo del afamado artista poncitlense, Juan José Méndez Hernández, aprendió el arte del modelado de figura al mirar y replicar el trabajo que observaba en casa. Eso lo impulsó a inmortalizar figuras humanas, abstractas y hasta religiosas que hoy son del aprecio de miles.