"Mentirosa", "corrupta" o "mujer fría y sin corazón" fueron algunos de los calificativos que intercambiaron la aspirante del oficialismo de izquierda y favorita a la presidencia de México, Claudia Sheinbaum, y su rival de centroderecha Xóchitl Gálvez en el primero de tres debates de antes de las elecciones del 2 de junio.