El Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) afirmó que no se ha producido "ningún impacto crítico" en la seguridad de Chernóbil, tras las advertencias del ministro de Asuntos Exteriores de Ucrania, Dmytro Kuleba, y del servicio de seguridad e inteligencia del país sobre una posible fuga de radiación, después de que la central fuera desconectada de la red eléctrica estatal.