Secuestros de familiares de miembros de cárteles mexicanos del crimen organizado que viven en Estados Unidos se ha incrementado como resultado de la competencia que tienen entre ellos, y es común que sean llevados a México para ser torturados y asesinados, por lo que piden la intervención de las autoridades estadounidenses, afirma un reporte del Buró Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés).